La subida del precio del petróleo Brent siempre se señala como uno de los motivos del aumento de los precios de los combustibles en las estaciones de servicio. Pero ¿qué pasa cuando este precio tiene un desplome como el de esta semana? En teoría, esta situación debería provocar una caída de proporciones similares en los precios que pagan los consumidores, pero, misterios del mercado, la bajada del precio en surtidor nunca es tan automática o inmediata como lo son sus subidas, algo que desde la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) siempre hemos entendido como una anomalía injustificable.
No sabemos si las petroleras están esperando que se consolide esta tendencia a la baja, originada por la crisis del coronavirus, para tomar una decisión, pero lo cierto es que el precio del barril Brent, de referencia en Europa, ha bajado un 55% en lo que va de mes de marzo y la mayor parte de los analistas coinciden en que este fenómeno del precio del petróleo en cifras bajísimas se mantendrá al menos unas cuantas semanas, sin que esta bajada se haya notado, en la misma proporción, en el precio final del combustible todavía.
En la CETM, creemos que no estaría de más que, en una de las situaciones más difíciles de nuestra historia reciente, y con todo el sector del transporte y la logística volcado para que no nos falte de nada durante estos días, las petroleras se esforzaran al máximo en ajustar a la baja el precio del combustible durante el estado de alarma, respetando la tendencia del mercado, facilitando así el trabajo de nuestras empresas, que se están sacrificando más que nunca para contribuir a la normalidad que en estos momentos tanto demanda la sociedad.