El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado este jueves el denominado Plan 2050 que marca los pasos a seguir en los próximos 30 años para que España pase al “grupo de alto rendimiento” en el que se encuentran los países más avanzados.

Toda la información al respecto, así como el texto completo puede encontrarse en la siguiente página web: https://www.espana2050.com/espana2050 El Ejecutivo ha creado un cuadro de seguimiento que recoge 50 objetivos concretos que deberían alcanzarse de aquí a 2050. Dichos objetivos se han agrupado en función del desafío al que pretenden dar respuesta:

– Desafío 1: Ser más productivo para crecer mejor
– Desafío 2: Conquistar la vanguardia educativa
– Desafío 3: Mejorar la formación y recualificación de nuestra población
– Desafío 4: Convertirnos en una sociedad neutra en carbono, sostenible y resiliente al cambio climático
– Desafío 5: Preparar nuestro estado de bienestar para una sociedad más longeva
– Desafío 6: Promover un desarrollo territorial, equilibrado, justo y sostenible
– Desafío 7: Resolver las deficiencias de nuestro mercado de trabajo y adaptarlo a las nuevas realidades sociales, económicas y tecnológicas
– Desafío 8: Reducir la pobreza y desigualdad y reactivar el ascensor social
– Desafío 9: Ampliar las bases de nuestro bienestar futuro

https://www.lamoncloa.gob.es/presidente/actividades/Documents/2021/200521-Estrategia_Espana_2050_Introduccion.pdf

RESUMEN DEL DESAFÍO 4: CONVERTIRNOS EN UNA SOCIEDAD NEUTRA EN CARBONO, SOSTENIBLE Y RESILIENTE AL CAMBIO CLIMÁTICO

A continuación, destacamos los aspectos que afectan en mayor medida al sector del transporte de mercancías por carretera:

El informe destaca que durante las últimas décadas ha aumentado la huella ecológica debido al escaso nivel de compromiso de los actores públicos con la agenda climática y medioambiental, el hecho de España frente a otros países europeos ha hecho “un uso limitado” de impuestos enérgico-ambientales y una apuesta insuficiente por soluciones medioambientales sostenibles.

Asimismo, señala como otro de los factores por los que ha aumentado la huella ecológica al transporte de mercancías y personas, “en particular el realizado por carretera” ya que es “el que más emisiones genera”. Esto se debe a la construcción de autovías en detrimento de líneas de ferrocarril, la dependencia del vehículo privado o la baja presión fiscal sobre el transporte, entre otros.

Se estima que “El futuro del transporte terrestre de mercancías dependerá tanto de la evolución de las cadenas de producción como de los potenciales avances tecnológicos, la penetración de los nuevos combustibles y la electrificación. En el transporte por carretera, el camión seguirá teniendo un rol predominante, al menos en el corto plazo, dadas las ventajas que aún presenta frente al ferrocarril (una flota de camiones amplia y competitiva, dotada de una extensa red viaria, frente a una red ferroviaria con pocos cargaderos y terminales y, por tanto, con escasa capilaridad en el país). En todo caso, en el medio y largo plazo, el ferrocarril deberá ir ganando competitividad, dado que es la mejor forma de transportar pasajeros y mercancías en grandes distancias con menores emisiones.”

Para responder a la emergencia climática, el Gobierno propone los siguientes objetivos:

 Objetivo 21. Reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero en un 90% en 2050, cumpliendo con nuestro compromiso de alcanzar la neutralidad climática a mediados de siglo (el 10% restante procederá de la absorción de los sumideros de carbono).

– Objetivo 22. Impulsar la transición hídrica como vía esencial de adaptación al cambio climático, logrando una reducción de la demanda total de agua de un 5% para 2030 y del 15% para 2050.

– Objetivo 23. Reducir la intensidad energética primaria en un 36% en 2030 y en un 63% en 2050 con respecto a los valores de 2015, en línea con los objetivos marcados en el PNIEC y la ELP.

– Objetivo 24. Lograr que la totalidad de la energía eléctrica sea generada mediante fuentes renovables en 2050, situándose este porcentaje en el 74% en el 2030, en línea con los objetivos marcados en el PNIEC y la ELP.

– Objetivo 25. Fortalecer el papel de la fiscalidad ambiental, incorporando a su diseño y aplicación criterios que impulsen una transición ecológica justa. España deberá alcanzar la media actual de los países europeos antes de 2030, e incrementar su ambición durante las dos décadas siguientes, con el fin de asegurar que se completa la descarbonización y se impulsa de forma decidida la economía circular y la protección medioambiental.

-Objetivo 26. Aumentar la superficie de producción agrícola ecológica hasta un 25% para 2030, en consonancia con la iniciativa Farm to Fork de la UE,300y un 60% para 2050.

-Objetivo 27. Aumentar las superficies forestales arboladas, con el fin de proteger la biodiversidad, mejorar la resiliencia de los ecosistemas e incrementar la capacidad de los sumideros de carbono, esencial para alcanzarla neutralidad climática en 2050. España deberá adoptar una tasa de reforestación media de 20.000 hectáreas al año durante el período 2021-2050(en línea con los objetivos de la ELP), frente a las 15.000 hectáreas actuales.

Y para alcanzar estas metas, se detallan medidas como las siguientes:

•Estimular el cambio modal favoreciendo medidas de movilidad alternativas al uso del vehículo privado como el transporte activo y el transporte público.

•Garantizar la sustitución de los vehículos de combustión interna (gasolina y diésel) por vehículos sin emisiones directas de CO2: fomentando la fabricación del vehículo eléctrico, impulsando la producción, reutilización y reciclaje de baterías, incrementando los puntos de recarga rápida e incentivando la compra de estos vehículos, así como elevar progresivamente los tipos impositivos sobre el consumo de diésel y gasolina hasta que ambos se equiparen al tipo impositivo medio de la gasolina en la UE.

• Ajustar la fiscalidad del transporte por carretera al uso real del vehículo, abordando la totalidad de impactos negativos generados y asegurando una mayor coherencia entre el tipo de vehículo adquirido y las necesidades del servicio. Para ello, se propone pasar de las actuales figuras fiscales sobre la compra, circulación y combustibles, a un impuesto sobre el uso medido real del vehículo que tenga en cuenta sus características: su peso, su potencia, sus emisiones de contaminantes atmosféricos y gases de efecto invernadero.

• Mejorar la red ferroviaria para transporte de mercancías y de personas. En lo que respecta a mercancías, es necesario ampliar la electrificación de la red ferroviaria, utilizar trenes híbridos con hidrógeno renovable para los tramos no electrificados, aumentar la eficiencia de las terminales intermodales, e incorporar vía férrea en aquellos puertos y aeropuertos que carecen de ella.

RESUMEN DEL DESAFÍO 6: DESARROLLAR UN MODELO TERRITORIAL, EQUILIBRADO, JUSTO Y SOSTENIBLE

Analizamos el sexto desafío puesto que también se incluyen algunas medidas que afectarían al sector.

Con el objetivo de promover una movilidad urbana sostenible, una de las medidas es la implantación de zonas de emisiones bajas y ultrabajas (como la de Barcelona o Madrid Central), peajes urbanos (como los que existen en ciudades como Londres o Milán), o supermanzanas (siguiendo el ejemplo de Barcelona).

Por otra parte, el documento señala que deberá promoverse un marco normativo y de incentivos que promueva el uso de vehículos bajos en emisiones, implementando consignas de proximidad que permitan la reducción de la logística del comercio electrónico (devoluciones y fallidos), creando ordenanzas sobre espacio mínimo de almacén y evitando actividades de reparto durante las horas de mayor congestión del tráfico.