El plan MOVES del gobierno central y las ayudas de la Comunidad para la renovación de flotas, alcanza los 4,7€ por vehículo industrial en la región, sin que el Ayuntamiento de Madrid destine un solo euro

MADRID CENTRAL PUEDE PROVOCAR LA RUINA DEL TRANSPORTE DE MERCANCÍAS

El Ayuntamiento de Madrid debe cumplir su compromiso de ampliar a 2020 el calendario de renovación de las flotas

La carne y el pescado fresco puede desaparecer de las cartas de los restaurantes del centro histórico de Madrid

Las multinacionales y franquicias de la Gran Vía, cuentan con los permisos extraordinarios para el abastecimiento nocturno que se niega a las Pymes

 

Madrid, 20 de marzo de 2019. En el actual contexto de lucha contra la contaminación atmosférica y contra el cambio climático, el transporte de mercancías es uno de los retos tecnológicos para la viabilidad del modelo económico de la sociedad actual.

Nos enfrentamos a un profundo cambio en el paradigma tecnológico aplicado a la movilidad que todavía sigue sin tener soluciones para el transporte de mercancías y el transporte colectivo de personas.

En este contexto, Madrid Central es el ejemplo de la incapacidad de la administración municipal para gestionar de forma eficaz la problemática de la movilidad, poniendo en peligro el tejido socioeconómico de las pymes que son las que, sin ningún apoyo económico ni voluntad de planificación, deben adaptarse a las nuevas restricciones al tráfico sin margen de maniobra ni posibilidades de adaptación.

Teniendo en cuenta los objetivos incluidos en el Plan A contra la contaminación atmosférica y por Madrid Central, que plantean diferentes criterios de sostenibilidad apoyados en las bajas emisiones o en la exigencia de emisiones cero, en estos momentos no existen soluciones tecnológicas para vehículos industriales más allá de 2025, que garanticen que puedan operar en el Distrito Centro.

En la actualidad no existen camiones adaptados a la categoría CERO, ni oferta suficiente en los ECO, ni para vehículos de más de 12t, ni grúas para transporte de contenedores de escombros, camiones de mudanzas, etc. Asimismo, la etiqueta C en los vehículos industriales se mantiene en un limbo técnico y legal, que no aporta seguridad jurídica a las Pymes.

Respecto a las furgonetas y camiones frigoríficos de menos de 3.500kg y adaptados al motor eléctrico, su capacidad de carga se ha visto reducida a una tercera parte de la capacidad actual, lo que pone en peligro el abastecimiento de producto fresco como carnes y pescados a toda la restauración del centro de Madrid.

Por otro lado, la intransigencia de la Delegación de Medio Ambiente del Ayto. de Madrid a la hora de tramitar las autorizaciones extraordinarias con criterios objetivos para facilitar la DISTRIBUCIÓN NOCTURNA, provoca el agravio comparativo entre las pymes del comercio, los espectáculos, la hostelería y el alojamiento, a los que no se reconoce sus necesidades especiales, frente a las franquicias y multinacionales de la Gran Vía a las que se autoriza la distribución y el aprovisionamiento en horario nocturno.

En cuanto a la CARGA Y DESCARGA de mercancías, Madrid Central ha incrementado un 136% la superficie de las APR del Distrito Centro, incrementando únicamente un 20% el horario de actividad de la distribución urbana de mercancías. Para poder garantizar el abastecimiento diario de las pymes ubicadas en Madrid Central, debería de producirse un incremento de la flota superior al 131,9% en un momento en el que se está produciendo un retroceso de cerca del 20% respecto a la actividad del sector de la distribución.

Teniendo en cuenta lo anterior, el transporte de mercancías debe acometer una doble inversión dirigida a la renovación de las flotas, adaptándose a las exigencias medio ambientales, y ampliando sus flotas para cubrir las 472 hectáreas de Madrid Central. Esta inversión, podría alcanzar los 2.000 millones de euros, en un contexto de falta de seguridad jurídica para los vehículos que se adquieren en estos momentos y que podría provocar la ruina del sector. Una inversión que carece del más mínimo apoyo a las pymes por parte de las administraciones: En efecto, sumando las ayudas del plan MOVES del gobierno central y las ayudas de la Comunidad para la renovación de flotas, la ayuda a las empresas apenas alcanza los 4,7€ por vehículo industrial en la región, sin que el Ayuntamiento de Madrid destine un solo euro.

Como consecuencia de todo lo anterior, la Plataforma de Afectados por Madrid Central se ve en la necesidad de reclamar dos cuestiones fundamentales para poder avanzar en el proceso negociador que evite el conflicto asociado a Madrid Central.

En primer lugar, la Plataforma de Afectados por Madrid Central reclama el cumplimiento del compromiso adquirido por la alcaldesa de Madrid en la reunión del 18 de diciembre pasado, en la que se acordó la ampliación mínima de un año del período de renovación de las flotas para los vehículos de transporte de mercancías para los vehículos sin etiqueta y tipo B, y que debería de aplazarse al 31 de diciembre de 2020 como período mínimo para evaluar y tomar decisiones sobre las nuevas tecnologías y combustibles, que garantice la viabilidad de las importantes inversiones que debe realizar el sector.

Teniendo en cuenta todo lo anterior, la precariedad e indefinición actual del debate sobre las tecnologías para un transporte medioambientalmente sostenible, la Plataforma de Afectados por Madrid Central, y particularmente las asociaciones
del sector transporte, se ven en la necesidad de exigir que no se implante ningún calendario de renovación de las flotas hasta que no se garantice que cualquier vehículo que se adquiera en estos momentos cumpliendo con los estándares ambientales actuales, tenga asegurada su utilización durante todo el período de amortización y vida útil del mismo.