La patronal del sector de la Comunidad madrileña afirma que se abren nuevas incógnitas ante la posibilidad de que comience a
utilizarse el pasaporte de vacunación
Madrid, 15 de marzo de 2021.- El sector del transporte de mercancías por carretera de la Comunidad se siente preocupado y menospreciado por las administraciones. Así de contundente se ha manifestado la organización patronal CETM-Madrid, después de que las instituciones públicas no hayan respondido a la petición de que los trabajadores de este sector sean prioritarios en el orden de vacunación frente al coranovirus, considerado como un sector esencial y estratégico.
Después de que ninguna institución haya respondido se abren nuevas incógnitas ante la posibilidad más evidente de que el pasaporte de vacunación comience a usarse en España el próximo mes de mayo.
Ante ello, los transportistas de la Comunidad de Madrid exigen formar parte de los grupos prioritarios para ser vacunados al seguir estando sometidos a una “gran exposición” al virus, debido a la movilidad en la que trabajan, si bien en un segundo orden, después del personal sanitario y sociosanitario.
“¿Qué ocurriría si para entrar en Francia, por ejemplo, nos requieren del pasaporte de vacunación y todavía no estamos vacunados?”, se han preguntado. Y esa organización empresarial ha respondido que la situación puede ser muy compleja ante la falta de vacunación por parte de sus trabajadores mientras ya se está pensando en la puesta en marcha del pasaporte de vacunación en varios países de la Unión Europea.
En la última Junta Directiva de CETM-Madrid se ha recordado que este sector fue considerado como esencial durante toda la pandemia, ya que ha permitido el abastecimiento de la población española a pesar de la situación sanitaria.
Se ha añadido, además, que las condiciones de trabajo de los transportistas y conductores profesionales “no son sencillas” al estar expuestos a posibles contagios debido a la postura “insolidaria” de algunos cargadores al continuar obligándoles a realizar las labores de carga y descarga de las mercancías en sus instalaciones.
También ha advertido de que los riesgos de contagio y la “escasa” posibilidad de recambios de conductores ante bajas laborales pondría en problemas la continuidad de su labor de abastecimiento a toda la sociedad con unas mínimas garantías sanitarias.